Son varios los artículos en periódicos o noticias en televisión que podemos encontrar estos días sobre la introducción de los teléfonos móviles en las aulas de nuestros centros. En algunos casos nos encontramos artículos en contra de su uso y otros que demandan una mayor integración en los centros educativos de la tecnología y, por ende, de los teléfonos móviles. Como recoge El Periódico los móviles en las aulas tienen dividida a la comunidad educativa. Nos encontramos con muchos centros educativos en los que se prohíbe por completo su uso, ya no sólo en las aulas, incluso en el patio. En relación a esa perspectiva, en el artículo mencionado nos encontramos como Jordi Romero, concejal de Cultura y Juventud de Malgrat de Mar, afirma que “ante la necesidad reclamada por los profesores” al acceder al centro el dispositivo se apaga o se silencia impidiendo su uso tanto en el aula como en el patio.
Esta perspectiva no sólo la encontramos en esa localidad. En el ItWorldEdu 2015, recientemente celebrado, Jordi Vivancos, responsable de tecnologías para el aprendizaje de la Generalitat, preguntó a los profesores asistentes cuantos trabajaban en un centro en el que el uso del móvil estuviera prohibido, como recoge la revista Dirigentes digital. La mitad de los profesores allí presentes levantaron la mano. Estas medidas se toman por la idea de que el uso del móvil distrae, crea conflictos y de que no tienen ninguna utilidad pedagógica. A tal llega la situación que nos podemos encontrar en el periódico El País una carta al director en el que se afirma que desconocemos el alcance del deterioro cognitivo producido por el uso de los Smartphone al sustituir determinadas funciones cerebrales por aplicaciones.
No podemos obviar el hecho de que vivimos en una sociedad donde el uso del teléfono móvil está generalizado, por lo que no tiene sentido prohibir herramientas que van a tener los jóvenes a su alcance. Es más, la Unesco defiende “el uso apropiado de los móviles” en lugar de prohibirlos. Se trata más de educar en el uso adecuado de la tecnología en general y del móvil en particular. Como afirma Gonzálvez (2011), existe una avalancha comunicativa la cual requiere aprender hábitos o mecanismos de filtrado y selección. Y qué mejor que en la escuela para trabajar esa particularidad. Incluso encontramos como la OCDE (2005) explica que para comprender y funcionar bien en este mundo los individuos necesitan dominar las tecnologías cambiantes y comprender la gran cantidad de información de la que disponemos. Por tanto se trata de conseguir que nuestros estudiantes lleguen a ser competentes digitalmente. Además, la tecnología móvil en particular móvil aporta a la educación conectividad, ubicuidad y, sobre todo, movilidad (Cantillo, Roura y Sánchez, 2012), aspectos muy interesantes a tener en cuenta.
Aunque existen estos centros en los que se prohíbe su uso, también encontramos algunos ejemplos en los que los móviles se convierten en herramientas útiles para el proceso de enseñanza y aprendizaje. Tal es el caso del IES Mata Jove en Asturias en el que no solo se permite el uso del móvil, sino que lo utilizan en clase con unas normas establecidas. Como en el centro afirman, se trata de adaptarse a los tiempos en lugar de luchar contra ellos. Más ejemplos podemos encontrar del uso de esta tecnología en los centros. Pero lo más importante de todo ello es el convencimiento de que hay que enseñar a usar la tecnología para que los jóvenes se puedan enfrentar al mundo en el que nos ha tocado vivir.
Cantillo, C., Roura, M. y Sánchez, A. (2012). Tendencias actuales en el uso de dispositivos móviles en educación. En La educación, digital magazine, 147 http://educoas.org/portal/la_educacion_digital/147/pdf/ART_UNNED_EN.pdf
Gonzálvez, V. (2011). Educación para la ciudadanía democrática en la cultura digital. En Revista Comunicar, 18 (36), pp. 131-138 DOI:10.3916/C36-2011-03-04
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (2005). La definición y selección de competencias clave. Resumen ejecutivo. Documento en línea consultado el 12 de octubre de 2010 en http://www.deseco.admin.ch/bfs/deseco/en/index/03/02.parsys.78532.downloadList.94248.DownloadFile.tmp/2005.dscexecutivesummary.sp.pdf
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